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Incluso el logo más cuidadosamente diseñado puede perder rápidamente su toque profesional si se manipula de forma incorrecta durante la edición. Ya sea que estés ajustando la composición para adaptarla a un nuevo diseño, actualizando la paleta de colores para una campaña fresca, cambiando el tamaño para diferentes plataformas digitales o agregando un nuevo eslogan para reflejar un cambio en la marca, es esencial proceder con cuidado. Para preservar la claridad, el equilibrio y la coherencia de marca de tu diseño de Logomax, debes aprender a evitar los errores comunes al editar logos en Inkscape. Lo que puede parecer un pequeño descuido —como estirar el logo de manera desigual, cambiar colores sin consultar las guías de marca o exportar en una resolución incorrecta— puede afectar drásticamente la percepción que tu audiencia tiene de tu marca.
Por fortuna, las potentes capacidades de edición vectorial de Inkscape te brindan las herramientas necesarias para realizar modificaciones precisas y deliberadas, sin sacrificar la calidad del diseño. Cuando se usa correctamente, Inkscape te permite afinar cada elemento de tu logo, desde el espaciado y las proporciones hasta el color y la configuración de exportación. Pero si se usa sin cuidado, incluso un pequeño ajuste puede dar como resultado un logo desequilibrado, pixelado o poco profesional.
Esta guía te lleva paso a paso por los errores de edición más comunes y, lo más importante, cómo evitarlos. Al seguir estas mejores prácticas, cada variación de logo que crees se mantendrá visual y profesionalmente pulida, con coherencia de marca y lista para usarse en sitios web, materiales impresos, anuncios digitales, perfiles de redes sociales y más.
Ya seas dueño de un negocio gestionando tus propios activos de marca o diseñador creando variantes para múltiples formatos, estos consejos te ayudarán a asegurar que tu logo de Logomax siempre mantenga su calidad original, sin importar dónde o cómo aparezca.
❌ El error:
Editar tu logo a partir de un PNG, JPG o incluso un PDF en lugar de comenzar con el archivo SVG original proporcionado por Logomax. Aunque estos formatos pueden parecer similares a simple vista, no están hechos para editarse, especialmente cuando se requiere el nivel de precisión y control necesario para mantener la calidad de la marca.
Los formatos rasterizados como PNG y JPG están basados en píxeles. Esto significa que no almacenan información sobre formas, curvas o texto como objetos editables. Así que, si intentas cambiar su tamaño, rápidamente tendrás problemas como bordes borrosos, pixelación y líneas irregulares. Peor aún, no puedes hacer cambios de diseño significativos, como actualizar el eslogan, recolorear elementos individuales o reposicionar partes del ícono, porque todos los componentes se han aplanado en una sola imagen.
Incluso los PDFs, aunque a veces conservan datos vectoriales, pueden comportarse de manera impredecible según cómo se hayan exportado o abierto. En muchos casos, el texto está convertido en contornos, se pierden las capas o los perfiles de color quedan incrustados, lo que dificulta o imposibilita la edición consistente.
✅ La solución:
Siempre comienza con tu archivo SVG original, el formato diseñado específicamente para gráficos vectoriales escalables y editables. Este es el archivo que recibiste de Logomax cuando compraste tu logo y siempre debe servir como la fuente maestra para cualquier cambio, variación o exportación.
El formato SVG te ofrece:
Puedes descargar tu archivo SVG desde el panel de Logomax dentro de los 60 días posteriores a la compra. Te recomendamos guardar este archivo en una carpeta claramente etiquetada y segura (por ejemplo, /Logo/Maestro/ o /Activos de Marca/Archivos Originales/) y tratarlo como tu fuente de referencia inalterable.
Al hacer ediciones, crea primero una copia del SVG y asígnale un nombre según la variación que deseas (por ejemplo, logo_icono_solo.svg, logo_eslogan_actualizado.svg). Esta práctica evita sobrescrituras accidentales y asegura que tu archivo original permanezca intacto para uso futuro.
Usar el tipo de archivo incorrecto no solo genera problemas técnicos, sino que daña la integridad de tu marca. Comenzar con el archivo correcto protege la claridad, flexibilidad y utilidad a largo plazo de tu logo.
Abres tu logo en Inkscape, haces clic sobre él y te das cuenta de que no puedes mover ni editar partes específicas —como el nombre de la marca, el icono o el eslogan— de forma individual. Esto se debe a que todo el logo sigue agrupado como un solo objeto. Esta es una de las frustraciones más comunes para los nuevos usuarios que trabajan con archivos vectoriales.
Cuando los elementos están agrupados, se comportan como una sola unidad. Tal vez intentes cambiar el color del icono o reposicionar el eslogan, pero en su lugar terminas moviendo todo al mismo tiempo. Esto impide una personalización precisa y puede retrasar incluso tareas simples como actualizar el texto o crear una versión solo de icono.
✅ La solución:
Es posible que necesites repetir este comando varias veces hasta que todos los componentes sean seleccionables de forma individual —especialmente si tu logo fue guardado con grupos anidados.
Una vez desagrupado, puedes:
Las herramientas de selección de Inkscape se vuelven mucho más potentes una vez que los elementos están separados —podrás usar el panel de alineación, las funciones de ajuste o los controles de capas para perfeccionar tu diseño con precisión profesional.
Importante:
Cuando termines de editar, siempre agrupa de nuevo tu logo antes de exportar. Selecciona todos los elementos (Ctrl+A), luego presiona Ctrl+G para agruparlos otra vez. Esto asegura que el diseño se mantenga intacto y que tu logo se escale o exporte como un diseño unificado.
Agrupar y desagrupar correctamente no es solo un paso técnico —es esencial para tu flujo de trabajo. Te da control creativo total mientras preserva el equilibrio estructural y la integridad visual con la que se creó tu logo de Logomax.
❌ El error:
Haces clic en tu logo para cambiar su tamaño, pero en lugar de escalarlo proporcionalmente, arrastras uno de los controles laterales o lo ajustas manualmente sin restricciones. ¿El resultado? Un logo demasiado ancho, demasiado alto o sutilmente deformado — lo suficiente para que se vea poco profesional o desbalanceado.
Este error es especialmente fácil de cometer cuando tienes prisa o trabajas con tamaños pequeños. Pero incluso las distorsiones menores pueden tener un gran impacto visual. Tu logo puede verse estirado, comprimido o descuidado, lo que reduce su efectividad y credibilidad.
✅ La solución:
Para proteger la integridad visual de tu logo, siempre escala proporcionalmente:
Si cambias el tamaño sin bloquear las proporciones, corres el riesgo de alterar la relación entre el ícono y el texto, distorsionar las curvas o hacer que las letras se vean estiradas o aplastadas — todo lo cual puede dañar la consistencia visual de tu marca.
Por qué importa:
Tu logo de Logomax fue creado con proporciones profesionalmente equilibradas. El espaciado, la simetría y las relaciones de forma fueron diseñados intencionalmente para que luzca bien en cualquier tamaño. Cuando distorsionas esas proporciones, no solo afecta la legibilidad, sino que también debilita la armonía visual y la confianza en el diseño.
Mejor práctica:
Al crear variantes de tamaño para web, impresión o redes sociales, duplica primero el original y luego cambia el tamaño de la copia correctamente. Así, tu archivo maestro permanece intacto y cada versión exportada mantiene el aspecto limpio y equilibrado que tu marca merece.
❌ El error:
Quieres cambiar el color de tu logo — tal vez para que combine con una campaña de temporada, un rediseño de sitio web o simplemente para experimentar. Pero en lugar de usar los valores oficiales de color de tu marca, eliges nuevos tonos a ojo o arrastrando la paleta de colores en Inkscape. El resultado puede verse bien a primera vista, pero no coincidirá con tus materiales existentes. De repente, tu azul de marca se ve más como turquesa en tu sitio web y como azul marino en volantes impresos.
Esta falta de consistencia en el color puede erosionar la identidad visual de tu marca. Confunde a las audiencias, diluye el reconocimiento y crea una apariencia dispersa y poco profesional en todas las plataformas.
✅ La solución:
Para mantener tu logo alineado con tu identidad visual, aplica siempre los cambios de color usando los valores precisos de tu paleta de marca. Así es como puedes hacerlo:
Consejo:
También puedes guardar los colores que usas frecuentemente en la paleta de Inkscape para acceder a ellos rápidamente. Esto ayuda a mantener la precisión en todos los proyectos y reduce el riesgo de inconsistencias si vuelves a trabajar en un diseño después.
Por qué es importante:
El color es uno de los elementos más fuertes para el reconocimiento de marca. Las audiencias suelen asociar tu logo con su color antes de leer el texto. Incluso pequeñas variaciones pueden hacer que tu marca se vea desorganizada o poco confiable. Usar los códigos de color exactos asegura que tu logo siempre luzca pulido e intencional, ya sea en pantallas, redes sociales, documentos impresos o empaques.
Mejor práctica:
Hazlo un hábito copiar tus códigos HEX directamente de la documentación de tu marca (o de las notas de personalización de Logomax, si aplica). Una vez que el color correcto esté aplicado, déjalo fijo y resiste la tentación de modificarlo a menos que estés creando una variación deliberada.
Con una aplicación consistente del color, tu logo mantiene la claridad, el reconocimiento y la fuerza visual para la que fue diseñado — sin importar dónde aparezca.
❌ El error:
Estás preparando un archivo de logo para usar en un sitio web, imagen de producto o superposición digital, pero cuando colocas el PNG exportado, aparece con un cuadro blanco o de color sólido detrás. Esto sucede porque el fondo no se hizo transparente antes de exportar. Puede parecer un descuido menor, pero ese cuadro visible puede señalar de inmediato una mala calidad de diseño y arruinar la apariencia profesional de tu marca en contextos digitales.
Un fondo transparente es especialmente importante cuando tu logo necesita mostrarse sobre diferentes imágenes, secciones de color, degradados o diseños dinámicos. No eliminar el fondo hace que tu logo parezca un gráfico recortado y pegado, lo que afecta la imagen limpia y profesional por la que Logomax es conocido.
✅ La solución:
Para asegurarte de que tu exportación PNG tenga un fondo transparente, sigue estos pasos cuidadosamente:
Consejo:
Una vez que exportes, prueba el PNG resultante abriéndolo sobre fondos claros y oscuros. Esto asegura que no queden restos o artefactos inesperados en el fondo. Un logo verdaderamente transparente debe verse nítido y sin bordes en cualquier fondo digital.
Por qué es importante:
Los PNG transparentes son esenciales para la identidad de marca moderna. Ya sea que tu logo aparezca en una miniatura de video de YouTube, una firma de correo electrónico o un encabezado transparente en tu sitio web, necesitas que se integre de manera natural en el diseño que lo rodea. Dejar el fondo activo se ve poco profesional y puede chocar con tu estética general, especialmente si el logo se coloca sobre superficies que no son blancas.
Mejor práctica:
Guarda tu exportación transparente con un nombre de archivo claro y descriptivo, como logo_icon_transparent.png o logo_white_text_clearbg.png, para que puedas identificar rápidamente la versión correcta para superposiciones y usos digitales.
Al configurar correctamente tu archivo para transparencia y eliminar cualquier elemento de fondo innecesario, te aseguras de que tu logo conserve su apariencia elegante y profesional en cualquier entorno digital.
❌ El error:
Has ajustado cuidadosamente tu logo en Inkscape, seleccionaste un formato como PNG y diste clic en exportar, solo para descubrir que la imagen final incluye un gran margen de espacio vacío… o peor aún, que parte del logo está cortada. Este tipo de errores de recorte son comunes cuando se selecciona el área de exportación incorrecta. ¿El resultado? Un archivo que se ve poco profesional, es más difícil de centrar o alinear en los diseños y no refleja el acabado limpio que se espera de un diseño de Logomax.
El espacio en blanco excesivo puede hacer que tu logo se vea pequeño o descentrado en encabezados web, correos electrónicos e imágenes de productos. Por otro lado, recortar parte del ícono o del eslogan puede confundir a los usuarios o debilitar la integridad visual de tu marca.
✅ La solución:
Para asegurarte de que tu logo se exporte con los límites correctos y sin sorpresas, debes seleccionar intencionalmente el área de exportación correcta en Inkscape. Así es como se hace:
Por qué es importante:
Un recorte preciso es clave para asegurar que tu logo se vea centrado y equilibrado donde sea que se use. Los logos desalineados o mal recortados pueden verse poco profesionales y crear problemas de espacio en sitios web, redes sociales o materiales impresos.
Consejo:
Cuando prepares varias versiones de tu logo (por ejemplo, completo, solo ícono, apilado), revisa siempre que cada variante tenga el área de exportación adecuada. Guárdalas con nombres de archivo específicos como logo_icon_selection.png o logo_tagline_drawing.png para mantener todo organizado.
Al entender cómo Inkscape maneja los límites de exportación y usar la opción de Selección para recortes limpios, crearás archivos de logo perfectamente dimensionados, consistentemente centrados y listos para usarse de inmediato en plataformas digitales, sin necesidad de edición adicional.
❌ El error:
Uno de los errores más comunes al preparar un logo para impresión es exportarlo con resolución de pantalla, que normalmente es de 96 DPI (puntos por pulgada). Aunque esta configuración es adecuada para plataformas digitales como sitios web o firmas de correo electrónico, es demasiado baja para aplicaciones de impresión, que requieren mucha mayor claridad. Usar imágenes de baja resolución para tarjetas de presentación, folletos, empaques o volantes puede resultar en logos borrosos, pixelados o con bordes poco definidos, lo que afecta la apariencia profesional de tu marca.
Puede que no notes el problema hasta que tu diseño se imprime; para entonces, ya es demasiado tarde y habrás desperdiciado tiempo, papel o dinero en un producto que no se ve nítido ni alineado con los estándares de tu marca.
✅ La solución:
Para asegurarte de que tu logo se vea igual de nítido en impresión que en pantalla, necesitas exportarlo a la resolución correcta o elegir un formato vectorial que se pueda escalar sin perder calidad.
Así es como puedes hacerlo bien:
Esto asegura que tu logo se vea nítido en impresión, aunque siga siendo un formato rasterizado (basado en pixeles) compatible con entornos no vectoriales.
Los archivos vectoriales permiten a las imprentas escalar tu logo a cualquier tamaño — desde una etiqueta pequeña hasta una lona grande — sin perder nitidez ni claridad. También mantienen los colores y la composición intactos, garantizando una apariencia limpia y profesional.
Cada imprenta tiene requisitos únicos según su equipo y las especificaciones del proyecto. Si tienes dudas, pregunta a tu proveedor de impresión qué formato y resolución prefiere. Algunas preguntas comunes son:
Ser proactivo evita reimpresiones costosas y garantiza que tu logo se vea justo como lo planeaste.
Al exportar a la resolución correcta o usar formatos vectoriales, mantienes la integridad visual de tu marca y aseguras que cada material impreso — desde empaques hasta materiales promocionales — refleje los mismos estándares de alta calidad que tu marca digital.
❌ El error:
Uno de los errores más fáciles —y frustrantes— al editar logos en Inkscape es guardar sobre tu archivo SVG original o no etiquetar claramente las versiones que exportas. Cuando todo se llama “logo.svg” o “final_final_version2.png”, es solo cuestión de tiempo antes de que surja la confusión. Puedes perder la pista de qué versión incluye tu nuevo eslogan, cuál tiene el fondo correcto o, peor aún, podrías sobrescribir por completo tu archivo maestro de logo.
Este tipo de gestión desorganizada de archivos lleva a perder tiempo, rehacer trabajo y a inconsistencias en la identidad visual de tus materiales. También aumenta el riesgo de enviar el logo incorrecto a clientes, impresores o de subirlo a tu sitio web.
✅ La solución:
Para mantenerte organizado y proteger tus archivos, haz el hábito de guardar cada versión de tu logo por separado con nombres de archivo claros y descriptivos. Trata cada archivo como una instantánea de un caso de uso o variación de diseño en particular.
Así es como debes hacerlo:
Adopta un sistema de nombres que deje claro de inmediato para qué es cada archivo. Por ejemplo:
Incluso puedes incluir la fecha o el uso previsto (por ejemplo, logo_linkedin_banner_Mayo2025.png) si creas muchas versiones temporales.
Nunca edites ni sobrescribas tu archivo original logo_original.svg. Este archivo vectorial es tu base: mantiene toda la editabilidad, claridad y estructura. En su lugar:
Este flujo de trabajo asegura que, pase lo que pase, siempre puedas volver a un archivo limpio.
Estructura tus archivos de logo en carpetas como:
Esto no solo ahorra tiempo al buscar, sino que ayuda a mantener una identidad visual consistente al trabajar con equipos o proveedores externos.
Al nombrar y guardar cada versión de tu logo con intención y estructura, te preparas para colaborar de manera eficiente, entregar proyectos más rápido y mantener una presencia de marca organizada, consistente y siempre lista para cualquier plataforma o campaña.
❌ El error:
Uno de los errores más comunes al trabajar con un logo bellamente diseñado —especialmente uno profesional como tu logo de Logomax— es la tentación de “mejorarlo” con ediciones excesivas. Esto suele incluir agregar frases adicionales, insertar múltiples formas o íconos, cambiar la disposición hasta que sea irreconocible, o alterar la tipografía de manera que rompa la armonía visual.
Estas ediciones excesivas tienden a restar claridad, reconocimiento y elegancia al diseño original. Lo que antes era un logo fuerte y refinado puede rápidamente empezar a verse saturado, desequilibrado o poco profesional, lo que afecta la credibilidad y profesionalismo de tu marca.
Los logos deben ser limpios, memorables y versátiles. Cuando se agregan demasiados elementos, se vuelve más difícil que las personas reconozcan tu marca de un vistazo o la recuerden después. El ruido visual siempre compite con el reconocimiento de marca.
✅ La solución:
La clave para editar un logo de manera efectiva es la moderación. Cada cambio debe tener un propósito claro, ya sea adaptar tu logo para un caso de uso específico, actualizar tu identidad de marca o mejorar la legibilidad en un nuevo formato.
Así puedes mantener tu diseño preciso e intencional:
Agrega solo una, y mantenla breve, relevante y consistente en estilo. Colócala debajo o al lado del logo, usando un tamaño y peso de fuente complementarios. Evita frases largas, eslóganes o varias líneas de texto; esto diluye el impacto visual y crea desequilibrio.
Ejemplos:
Mantente fiel a tu paleta de marca establecida. No improvises nuevos tonos ni uses varios colores a menos que formen parte de tu identidad. Usa exactamente los valores HEX, RGB o CMYK de tu guía de marca.
Ejemplos:
Asegúrate de que el espaciado, la alineación y las proporciones se conserven. Puedes colocar el ícono arriba o al lado del texto, o ajustar para una disposición horizontal o vertical, pero hazlo pensando en el equilibrio. Usa las herramientas de alinear y distribuir de Inkscape para mantener todo ordenado.
Ejemplos:
Los logos minimalistas no son solo una tendencia de diseño; son prácticos. Se adaptan mejor, se imprimen más limpios y mantienen su forma en contextos saturados como íconos de aplicaciones o señalización de tiendas. Cada elemento adicional aumenta la complejidad y reduce la adaptabilidad.
En resumen: Confía en la fuerza del diseño original de tu logo de Logomax. Fue creado para ser versátil y causar impacto. En lugar de rehacerlo, busca mejoras sutiles y con propósito que eleven tu marca sin sobrecargar el diseño. Un logo que se vea limpio y coherente siempre superará a uno que intenta hacer demasiado.
❌ El error:
Un logo puede verse perfecto a pantalla completa en Inkscape: líneas nítidas, composición equilibrada, texto legible. Pero si no pruebas cómo funciona en tamaños pequeños, especialmente en escenarios reales como fotos de perfil en redes sociales, favicons, íconos de aplicaciones o firmas de correo electrónico, corres el riesgo de perder claridad e impacto.
Los problemas comunes en escalas pequeñas incluyen:
Tu logo de Logomax está diseñado para ser versátil, pero esa versatilidad depende de tu capacidad para adaptarlo y optimizarlo para cada caso de uso. No previsualizar tu diseño en dimensiones pequeñas es un descuido crítico que puede debilitar la presencia de tu marca, especialmente en entornos digitales.
✅ La solución:
La optimización para tamaños pequeños no significa rediseñar tu logo, sino probar y preparar variaciones adecuadas al tamaño de manera proactiva.
Así es como puedes hacerlo de manera efectiva en Inkscape:
Aleja el zoom en Inkscape y usa las reglas o guías basadas en píxeles para previsualizar tu logo en estas dimensiones típicas:
Si notas que el texto se vuelve ilegible o los elementos visuales se mezclan, es momento de considerar simplificar.
Para espacios extremadamente limitados (como favicons o mosaicos de aplicaciones), elimina el texto y exporta solo la parte del símbolo de tu logo. Esto mantiene la coherencia visual de la marca y evita el desorden.
Puedes nombrar la versión claramente — por ejemplo, logo_icon_only.svg o logo_appicon.png.
Coloca la versión de tu logo a pequeña escala tanto en fondos oscuros como claros para confirmar:
Si un eslogan o elemento secundario se vuelve ilegible a 64–100 píxeles de ancho, es mejor omitirlo en ese contexto que incluir texto ilegible. La legibilidad constante genera confianza, mientras que el texto pequeño y borroso la debilita.
Consejo:
Haz parte de tu flujo de trabajo exportar y previsualizar todas las versiones del logo en entornos reales y a tamaño real, como maquetas de aplicaciones móviles, firmas de correo electrónico, pestañas del navegador, etc. Así aseguras que tu branding se mantenga fuerte y consistente, sin importar lo pequeño del formato.
Al probar y optimizar cuidadosamente para cada escala, proteges la claridad de tu diseño y garantizas que incluso los puntos de contacto más pequeños de tu marca dejen una impresión profesional y pulida.
Tu logo de Logomax no es solo un recurso visual: es una representación cuidadosamente diseñada de la identidad de tu marca. Ya sea que se muestre en tu sitio web, impreso en tarjetas de presentación o en la firma de un correo electrónico, tu logo siempre debe verse nítido, alineado y fiel a su diseño original. Ahí es donde entran las prácticas inteligentes de edición.
Inkscape te da un control increíble sobre cada detalle vectorial, pero con ese poder viene la responsabilidad. Incluso pequeños descuidos —como exportar el área incorrecta o usar colores inconsistentes— pueden afectar la percepción del usuario, generar inconsistencia de marca o perder la confianza en tu profesionalismo. Por eso, dominar algunos principios esenciales de edición puede marcar la diferencia entre un logo que se ve “suficientemente bien” y uno que se ve de clase mundial, en cualquier lugar donde aparezca.
✅ Trabaja siempre desde tu archivo SVG original
Esto preserva la capacidad de edición, la resolución nítida y la integridad de las capas en todas las versiones. Nunca uses un PNG o JPG para hacer cambios.
✅ Desagrupa y vuelve a agrupar elementos según sea necesario
Desbloquea el control detallado durante la edición desagrupando los componentes, y vuelve a agruparlos antes de exportar para mantener el equilibrio estructural.
✅ Redimensiona solo con proporciones bloqueadas
Evita la distorsión manteniendo presionada la tecla Ctrl (o Cmd en Mac) al escalar. Así, tu ícono y texto se verán armoniosos y profesionales.
✅ Usa los códigos exactos de color de la marca
Nunca adivines los colores. Ingresa los valores HEX o CMYK directamente para mantener la consistencia de color en web, impresión y redes sociales.
✅ Exporta en la resolución o formato adecuado
Usa 300 DPI para impresión, o exporta archivos vectoriales como PDF o EPS para recursos escalables y listos para imprimir. Para digital, exporta PNGs limpios con fondo transparente.
✅ Guarda cada variación con un nombre claro y descriptivo
Esto previene sobrescrituras, asegura el control de versiones y facilita la gestión de archivos de logo en campañas y plataformas.
✅ Prueba tu logo en varios tamaños
Asegúrate de que sea legible y reconocible a escalas pequeñas, como íconos de apps, favicons o miniaturas de redes sociales.
No lo olvides: tu compra en Logomax incluye personalización profesional gratuita durante 30 días. Ya sea que necesites actualizar el nombre de la empresa, modificar un eslogan o ajustar un color, puedes solicitar el cambio directamente desde tu panel. Nuestro equipo se asegurará de que tu logo se mantenga alineado con tu marca y luzca perfecto, siempre.
El logo que compraste en Logomax fue diseñado para ser atemporal, flexible y memorable. Siguiendo las mejores prácticas de edición de esta guía, no solo preservas esa calidad, sino que también le das a tu marca la capacidad de mostrarse de manera consistente y segura, donde sea que vaya.
Desde tiendas en línea hasta lonas impresas, desde perfiles de Instagram hasta propuestas de negocios, tu logo merece brillar. Con ediciones cuidadosas y exportaciones bien hechas, te aseguras de que siempre lo haga.